domingo, 24 de abril de 2022

29 DE ABRIL, DÍA INTERNACIONAL DE LA DANZA

El Día Internacional de la Danza se celebra el 29 de abril desde que fue establecido en 1982 por el Comité Internacional de la Danza del Instituto Internacional del Teatro (ITI). Esta fecha conmemora el nacimiento (en 1727) de Jean-Georges Noverre, bailarín y maestro  considerado el creador del ballet moderno.

Cada año el ITI encarga a una personalidad conocida del mundo de la danza la redacción de un mensaje que se lee en todo el mundo. El objetivo de esta celebración y de ese mensaje es el de unir todas las danzas en este día, para celebrar esta forma de arte y mostrar su universalidad.

El Mensaje del Día Internacional de la Danza 2022 le ha sido encargado a la directora del Ballet Nacional de Corea, Sue Jin Kang (Seúl, 1967):

«La catástrofe del Covid-19 ha detenido la vida libre tal y como la conocíamos y estar en medio de esta tragedia nos hace replantearnos el significado de la ‘danza’ y de los ‘bailarines’. En un pasado lejano, la danza era un medio primordial de expresión y comunicación a través de los gestos, convirtiéndose en un arte escénico que conmovía el alma e inspiraba al público. Es un arte momentáneo que es difícil de restaurar en su forma original una vez completado porque se crea con todo el cuerpo y el alma. La danza está hecha de momentos efímeros, lo que predestina a los bailarines a estar en constante movimiento. Sin embargo, el Covid-19 ha restringido e incluso bloqueado el arte de la danza en su forma original.

Aunque la situación está mejorando, los espectáculos de danza siguen estando sujetos a muchas restricciones. Esto nos hace atesorar los preciosos recuerdos de los tiempos en los que la danza y los bailarines brillaban como joyas e iluminaban el mundo, transmitiendo la angustia y la ansiedad humana, la voluntad y la esperanza de vivir.

Del mismo modo, es importante recordar que en una de las diferentes réplicas de la peste negra surgida en la Europa medieval, el 28 de junio de 1841, se estrenó en la Ópera de París el ballet ‘Giselle’, que representa el amor más allá de la muerte, y recibió una respuesta explosiva. Desde entonces, ‘Giselle’ se ha representado en toda Europa y en todo el mundo para reconfortar y animar a las almas de la humanidad asolada por la pandemia. Ésa es mi manera de entender ‘Giselle’, tal y como se demostró desde su primera representación: es el magnífico espíritu de una bailarina que intenta escapar de la gravedad de las penurias que azotan el mundo.

El solitario y cansado público está sediento de la simpatía y del consuelo de los bailarines. Como bailarines, creemos que batir nuestras alas da esperanza a los corazones de los que aman el arte de la danza y les da el valor para superar esta pandemia. Mi corazón ya comienza a palpitar».

No hay comentarios:

Publicar un comentario